La segunda ola de calor que afecta a todo el centro de Andalucía. Unas temperaturas que han desactivado a la mosca del olivo, que ha desaparecido de los olivares del territorio. Por contra, estas altas temperaturas son perfectas para el desarrollo del ciclo de la chicharra, que anda a sus anchas entre los olivos.
Conocemos cómo está la situación del olivar en el sur de Córdoba con Antonio Pozo, técnico de la API de Lucena